Un ojo compuesto es una órgano sensorial altamente especializado compuesto por unas estructuras conocidas como omatidios, las cuales están a su vez compuestas por células fotorreceptoras. La superficie externa de un omatidio es una lente hexagonal, debajo de la cual se encuentra una lente cónica capaz de captar la onda lumínica. La evidencia más importante de animales con ojos complejos que habitaron el planeta hace millones de años fue el descubrimiento de un ojo fosilizado en un crustáceo (aprox. 515 millones de años atrás). El ojo de este animal estaba compuesto por miles de lentes. Interesantemente, las lentes del centro del ojo compuesto se destacaban por su mayor sensibilidad, lo cual se cree le conferían a este crustáceo la habilidad de distinguir mejor estructuras y formas en ambientes oscuros. En consecuencia, este descubrimiento soporta la idea de la evolución temprana de la vista como una característica fundamental que le habría conferido a una especie de crustáceo la posibilidad de distinguir fácilmente a sus depredadores.
A glucose molecule is too large to pass through a cell membrane via simple diffusion. Instead, cells assist glucose diffusion through facilitated diffusion and two types of active transport.
